lunes, 8 de mayo de 2017

El desaparecido viaducto de las Madejas

Sevilla es una caja de sorpresas, pero para encontrarlas, hay que escarbar en la memoria, pues en pleno siglo XXI es difícil dar con ellas a simple vista. Hoy en día es una ciudad de avenidas de cuatro carriles que te llevan hasta su mismo corazón, pero antaño, la ciudad fue un sin fin de callejas, conventos, murallas y acueductos que hacían "la pequeña Florencia".
Una de esas estampas o "tesoros", lo encontrábamos en pleno corazón del barrio de la Calzá, en el cruce de la Calle Luis Montoto con Calle Juan Antonio Cavestany, y era conocido popularmente como el Puente de las Madejas...


Su construcción se debió a dos motivos muy importantes, el primero por que era parte del tramo final del acueducto de los "Caños de Carmona", que llevaban el agua hasta la Puerta de Carmona donde se encontraban las cisternas. Y el segundo, por que en su parte baja formaba un puente/viaducto que salvaba el desnivel y el río Tagarete, que en aquel entonces cruzaba la ciudad de Sevilla.
Para encontrar este tesoro o lo que queda de él, tenemos que echarle un poquito de imaginación, pues tan solo se conserva parte de la primera arcada del acueducto que cruzaba el puente...


Recordemos, que esta obra nos fue legada de los Romanos, conservada y restaurada por los Almohades, hasta que del 1868 al 1911 nos dio por liarnos con ella a piquetazos, dejando tan solo dos tramos muy pequeños, uno de ellos, como acabamos de comentar, el que pertenecía a este puente...


El otro tramo que dejamos en pie está a tan solo 200 metros, y se salvó por estar en terrenos de propiedad privada, las antiguas Huertas de la alcantarilla de las Madejas, como también lo estaba este pequeño tramo, pues ambos estaban destinados a desaparecer por el ensanche de Luis Montoto y la posterior construcción del puente de la Calzá...


Para situarnos, tendríamos que imaginar que estábamos sobre el Puente de las Madejas, donde posteriormente se construiría el Puente de la Calzá...


El pequeño tramo de acueducto que vemos al fondo es el que posteriormente sería tapado por el Puente de la Cazá, puente que también desapareció tras las obras de 1992...


El Puente de la Cazá podríamos decir que fue el ángel protector de estos dos tramos de acueducto, y que sin él y un poco la vista gorda de los gobernantes de la época, hubieran desaparecido sin remedio alguno a principios de 1930...


Quiero cerrar este articulo con una entrañable fotografía de las vías y el Puente de la Calzá. Vías que entonces cruzábamos mi madre y yo para visitar a mi tío que por aquel entonces tenia su taller en el Barrio de San bernardo...


El derribo de este puente en los años 90 fue un desahogo bastante importante para la ciudad, pues con su desaparición, se dio oxigeno a ese sector y se facilito enormemente el transito de peatones y vehículos en un cruce tan estratégico de la ciudad como lo fue este de Luis Montoto...


Terminamos como hemos empezado, recordando que Sevilla es una caja de sorpresas, y que como siempre les digo desde que empece la andadura, están totalmente invitados a descubrirlas desde este pequeño rincón cibernético llamado el pasado de Sevilla.

Antonio Narvona López
Universidad de Sevilla
ABC

1 comentario:

Juan Antonio dijo...

Me ha parecido muy interesante y me ha encantado este nuevo conocimiento. Muchas veces vemos los restos de trozo de cultura que nos queda por Sevilla y no tenemos la inquietud de conocerlos algo más.