martes, 3 de enero de 2012

Las tumbas itinerantes

El que mas o el que menos, "mas católico o menos católico", que ha paseado alguna que otra vez por la Plaza de la Encarnación, se ha sentido tentado de entrar en la Iglesia de la Anunciación. Una de las iglesias con mas historia de la ciudad de Sevilla, y sin duda de las mas cofrades que existen.
Para mi personalmente guarda un encanto muy especial, ya que a pesar de sus grandes dimensiones y de sus paredes semidesnudas, entierra en si, un  intimismo y recogimiento que invita a la relajación y a la reflexión.

Al adentrarte siempre te llama la atención varios detalles que no acaban de explicarse en la vida contemporánea del templo, como por ejemplo esos frescos a medio terminar, o esas hornacinas desnudas a los laterales del templo...


Esas dos hornacinas o esos dos huecos son los que hoy van a ocupar nuestro viaje al pasado de sevilla. Hoy en dia esos huecos son ocupados por las imágenes secundarias de los pasos de la Hermandad del Valle, pero si investigamos un poco y nos adentramos en la historia de esta iglesia encontramos la pista que buscábamos...


 La pista la encontramos en esta fotografía del Templo tomada el siglo pasado. Para situarnos, imaginemos que tenemos el altar mayor a nuestra espalda, y lo que vemos de fondo es la entrada principal al templo, ¡y ahí lo tenemos!...


Lo que ocupaba esos huecos o esas hornacinas eran las hermosisimas tumbas de los Señores de Tarifa, Don Pedro Enriquez de Quiñones en el lado izquierdo del Tempo y su mujer en el lado derecho.
La ubicación original de dichas tumbas era la del Monasterio de la Cartuja de Santa Maria de las Cuevas,  en nuestra ciudad, pero cuando los Cartujos abandonaron el Monasterio, las tumbas fueron trasladadas a la Iglesia de la Anunciación.


En los años 80, el Monasterio de la Cartuja sufrió una profunda restauración, y  las tumbas fueron de nuevo trasladadas desde la Iglesia de la Anunciación a la Cartuja, recobrando con ello el Monasterio su aspecto original y dejándonos en la Anunciación dos tristes hornacinas sin ni siquiera una placa que nos explique el porque de su existencia.


Llama la atención de la primera foto en blanco y negro que hemos visto, el detalle en el que vemos las imágenes de la Hermandad de los Estudiantes en su emplazamiento originario...


Ocupado hoy en día por los titulares de la Hermandad del Valle, ya que como todos sabemos, los Estudiantes se marcho al Rectorado o antigua Fabrica de Tabacos, y el Valle venia del Santo Ángel, "huyendo" como quien dice de una mas que mala relación con los carmelitas.


Miguel Fuente Rey
Ana Tovar Lopez

4 comentarios:

Francisco Espada dijo...

Es fantástico cómo recuperas el pasado artístico y cómo ilustras mi mucha ignorancia. ¡Gracias y felicidades!

José Luis dijo...

Interesantísima entrada. Sigo su blog y me gustan este tipo de aclaraciones de temas y edificios sevillanos, así como de su hitoria, en las que usted destaca. Un saludo y mis felicitaciones.

Manupé dijo...

Acabo de topar con tu blog debido a un libro que me ha llevado a averiguar la existencia del Hotel Madrid de la Encarnación...Es magnífico (el hotel y tu blog)...Gracias por este trabajo de prospección urbana...saludos

negrodesanjulian dijo...

sencillamente asombroso me alegro de haber dado con este blog mi mas enhora buena y gracias