lunes, 6 de febrero de 2017

Lo que no quieren que veamos

Si hay una imagen que puede avergonzar a un urbanista o arquitecto, es la de un derribo...


Duele, ¿verdad?, es una imagen que representa muchas cosas, indefensión, impotencia, total falta de sensibilidad o incluso carecer de un mínimo nivel cultural.
Muchos ya sabrán que estamos viendo en esta fotografía, pues al fondo vemos el mamotreto del Cabo Persianas, construido sobre los cimientos de unos de los mejores palacios que tuvo sevilla...


Y sí, lo que vemos en primer plano, son las ruinas del derribo de nuestro añorado Hotel Madrid...



Una joya artística que ni Joaquín Romero Murube pudo salvar de la piqueta, y mira que lo intento hasta el último momento, y que era una de las maravillas que componía la Plaza de la Magdalena por su flanco derecho...


Si observamos la imagen con detenimiento, saquen valor para ello, veremos que han arrancado los azulejos antes del derribo, y que lo único que han dejado son las ricas yeserías que componían las arcadas...


Estas, las arcadas que vemos en la fotografía, corresponden al la parte interior del vestíbulo que daba al patio de cristales, y que unía a su vez la planta baja con las hermosas y ricas escaleras que daban acceso a la planta superior...


Hoy en día, Sevilla sigue tropezando con la misma piedra y estamos asistiendo en pleno 2017, al derribo de una de las mejores casas del arquitecto Talavera, en pleno corazón del barrio de Nervión, del que dicho sea de paso, no va a quedar nada.

Antonio Gromi Lopez
Jose Albergó Gracia Tobar

miércoles, 1 de febrero de 2017

Unos cardan la lana y otros...

"Unos cardan la lana, y otros se llevan la fama"... O al menos eso tenían que pensar estos señores cuando la historia solo dejo frases escritas para los cargadores del puerto...


Estamos en 1920, en Marqués de Paradas esquina con la calle Pedro del Toro, y vemos a los Mozos de maletas de la estación de trenes Plaza de Armas...


Imaginamos que estarán haciendo tiempo al sol mientras llega el siguiente tren procedente de Córdoba. Otros compañeros aprovechan para tomarse un chato de vino en la taberna que tienen justo al lado...


Trabajadores del tren, que enlazaban turnos de sol a sol, de lunes a domingo sin un reconocimiento publico...


Parece que todo tiene una fecha de caducidad en la vida, hasta los oficios, y es que incluso miramos con cierta nostalgia ciertos personajes que antes eran parte de nuestro entorno cotidiano...


Fernando Romero Hato
Universidad de Sevilla