domingo, 27 de abril de 2014

A la mañana siguiente

Durante este periodo de descanso he recibo cantidad de correos, algunos positivos y otros negativos, yo lo divido en dos para que todo el mundo nos entendamos, los que quieren o no les importa seguir conociendo el Pasado de Sevilla a través de imágenes relacionadas directamente o indirectamente con nuestra Semana Santa, y los que por el contrario piensan que se esta desvirtúa el espíritu de este blog con tanta fotografía de Semana Santa.
Responderé de forma general y para que cada cual tome nota de lo que mas le interese. Este blog nace de forma espontanea, sin ningún animo de lucro o merito y con el único fin de dejar algún tipo de legado a mi hijo, a nuestros hijos, de lo que tanto amo y quiero, que es Sevilla y como es consecuente su Pasado. Para mi Sevilla y Semana Santa están unidas y relacionadas pues la historia de ambas han ido cogidas de la mano desde hace mas de 500 años, que ya son años oiga, y desde luego no soy yo nadie para separarlas y mucho menos para discriminar una en favor de otra. El blog seguirá como es costumbre y solo decir que espero que aquellos que son mas reticentes no nos abandonen por que con ellos y con todos los demas es posible que este blog tome vida en cada lectura de cada nueva entrada.
Nada pido por realizarlo y nada exijo por ofrecerlo, sigamos todos juntos descubriendo nuestra Sevilla y que cada uno tome los matices que mas le guste de cada fotografía.

Volvemos y seguimos con este apasionante paseo por la Sevilla desaparecida y a veces desconocida, volvemos a sumergirnos en el Pasado de Sevilla, esta vez con una fotografía que nos lleva al pasado de una Sevilla costumbrista y de barrio, hoy nos vamos a la Macarena de los callejones...


Que maravilla de imagen, las señoras ya tocadas de riguroso luto, los niños subidos a los postes de la luz para ver en toda su grandeza ese portentoso y ya desaparecido misterio de la Sentencia.
Estamos en justo en la esquina de Perafàn de Rivera con Don Fabrique, y un poco a lo lejos tenemos la vista del imponente Hospital de la Cinco Llagas...


En esa pequeña ampliación vemos detalles importantes, el primero son ese pequeño grupo de casas bajas adosadas al final de la fachada del Hospital, casas que debieran ser derribadas para la terminación del mismo con ese gran torreón que lo caracteriza en cada una de sus cuatro esquinas, y también vemos el señor que lleva el canasto posiblemente cargado de almendras fritas y cartuchitos de papel. Una pena que se perdiera la costumbre de esos vendedores ambulantes siendo el ultimo de ellos Vicente el del Canasto, que boquita tenia el joio como le pillaras en un mal día. Hoy en día me alegra enormemente ver de nuevo esta figura en las tardes del Jueves Santo por la Calle Feria a la salida de Montesion, esperemos que se vaya cuajando en el tiempo y no quede solo en anécdota.
Por otro lado, tenemos que reseñar otro detalle bastante bonito y que este ultimo año, no se si por las ganas que teníamos de ver de nuevo cofradías después de tanta lluvia se ha vuelto a poner de manifiesto en muchas calles de sevilla, y es el de los balcones llenos de gente...


Vemos también la antigua disposición del misterio de la Sentencia, con el Cristo vuelto de espaldas, como así lo ideara en su momento Juan Manuel Rodríguez Ojeda.
Todo el entorno de los Callejones, incluso la misma Don Fabrique ha cambiado muchísimo por desgracia, y digo por desgracia por que ha ido a peor, y es que yo soy un enamora de esa Macarena de casitas bajas con tejas de barro...


Miguel Talaron Suárez

9 comentarios:

primo dijo...

Tienes toda la razon en eso de que Sevilla y Semana Santa van de la mano y que seria del Pasado de Sevilla si no fuera por esas fotos de Semana Santa en la que salen esos edificios.

Mari Carmen dijo...

Tu blog es y será un verdadero y maravilloso legado que todos podremos disfrutar y guardar como lo que es: UN TESORO.

Hice un concurso para esta Semana Santa, (unos trece días antes de su comienzo), si alguién hubiera contestado las preguntas, sin dudas, serías tú. Lástima que no lo vieras. Lo puse fácil, pero no me contestó nadie.

Seguiré siendo una fiel de tu blog que tanto valoro y aprecio, no te canses nunca, miarma.

Muchas gracias.

Un abrazo.

Mari Carmen.

Carlos dijo...

Yo quiero desde este comentario enviarte todo mi apoyo y adhesión a la labor que estás realizando con tu blog en favor del conocimiento de nuestra muy querida Sevilla en cuanto a su historia dándonos a conocer muchas cosas y a recordar otras, en cuanto al tema de la Semana Santa me hago eco de tus palabras, no puedo concebir Sevilla sin su Semana Santa ni una Semana Santa sin Sevilla.
Al igual que te dice Mari Carmen sigo y seguiré siendo un fiel seguidor de tu blog que, perdona, lo considero un poco mío.
Ánimo y gracias.
Carlos

Marco Z dijo...

Respecto a la fotografía, no sé si el lugar indicado es el exacto. Es una esquina, el paso se encuentra caminando por la calle don fadrique, y llegando a una esquina con otra calle, cuyo nombre es ilegible, pero que podría ser resolana. Por este motivo, esa esquina sería justo enfrente del arco, donde el puesto de calentitos, y no el lugar donde se aprecia la foto moderna. de hecho, si fuera ese punto, el paso no se encontraría en Don Fadrique, sino en Perafan de Ribera. Hago el comentario con el único objetivo de aportar, y elogiando la magnífica labor que haces en el blog.

Francisco Espada dijo...

Pido perdón si pudiera molestar a alguien, pero me parece algo pueril querer separar la Semana Santa y Sevilla, (el perdón es porque había pensado decir algo más fuerte y luego me he contenido).
Seguramente el mayor aporte fotográfico de las calles de Sevilla sea con motivo de la Semana Santa. Así sucede con frecuencia en este blog que, colateralmente a las imágenes de los pasos, hay materia para ver la fisonomía de la ciudad y su transformación, tanto del caserío como de sus gentes.
Ánimo, a mi me parece una labor encomiable.
Un abrazo.

Angerona dijo...

Qué bueno...!!! almendras fritas o, camarones, que también los había que, con su canasto al brazo, vendían por aquí y por allá sus cartuchitos de camarones.
Me llama la atención que hubiese casas bajas adosadas a la fachada del antiguo Hospital. Comentas que fueron derribadas para construir los torreones de las esquinas, pero en unas primeras fotos de 1850 ya estaban construídos esos torreones. La fotografía que nos ofrece es anterior a esa fecha?
En cuanto a lo demás, decir lo que ya hemos dicho anteriormente; es gracias a la Semana Santa sevillana que hoy en día podemos dar testimonio gráfico de cómo era no solo nuestra ciudad sino también sus gentes de entonces.

Marco Z dijo...


Sigo insistiendo en que la localización de la foto es errónea. De hecho, cuando la hermandad ha transitado los callejones lo hacía por el entorno de esperanza y Torrigiano, pero no llegaba hasta Perafan de Ribera (entonces huertas). Para ello, intento adjuntar una foto de la misma época pero de mejor calidad, en la que se observan los edificios, y tal y como pensaba, se trata de la esquina Don Fadrique - Resolana, justo en las puertas del mismo Arco (que no se ve).

Marco Z dijo...

No sé como adjuntar la foto, pero si me dejáis una forma, os la hago llegar. Gracias.

Unknown dijo...

Ante todo, darte la enhorabuena por el magnífico trabajo que haces en este blog, con toda sinceridad te digo que es el mejor que he leido nunca. A pesar de que soy joven y he conocido menos de la Sevilla de antes que muchos de los aquí presentes, este tema me parece interesantísimo, ya que soy un enamorado de mi ciudad (además de un enamorado de su semana santa).
Por otro lado creo que lo que comenta Marco Z es cierto. Lo digo por que en la foto llego a apreciar el nombre de las calles que aparecen y son Resolana y Don Fadrique, por lo que el edificio que se ve al fondo no sería el Hospital de las Cinco Llagas. Esto se puede comprobar porque las ventanas y tejado de esta foto no coinciden con las que actualmente están en este edificio, aunque desconozco si este ha sufrido alguna variación de esa época a nuestros días.
Hago este comentario desde el máximo respeto a este estupendo blog que me tiene enganchadísimo y siempre con la posibilidad de que puedo estar equivocado.
Muchas gracias por ofrecer este maravilloso legado de fotografías y documentos y espero que continúes de la misma manera, regalándonos en cada entrada un pedacito del pasado.
Un cordial saludo,
Juan.