Sevilla se caracteriza por algo que sabe hacer muy bien, y es la facultad de destruir su caserío, ya sea en este siglo o en los pasados.
Vamos a estudiar dos fotografías muy interesantes, para lo que tendremos que viajar en el tiempo hasta una tarde del Jueves Santo...
Estamos contemplando la Hermandad de la Exaltación, realizando su estación de penitencia. Hay particularidades obvias que nos llaman la atención a primera vista, por ejemplo la túnica antigua que vestían los nazarenos de la hermandad o la antigua composición del paso de misterio, con el famoso sayón de la trompeta que a tantos sevillanos nos gustaría que se recuperase.
Pero vamos al tema, la calle, ¿porqué calle esta discurriendo la cofradía?. Vamos a tomar como referencia un balcón...
Se observa en ambas instantáneas, y es muy peculiar por su diseño y cerramiento...
Y ahora, localicemos ese balcón en el callejero actual. Para eso tenemos que tener dos detalles muy importantes en cuenta.
El primero es que las imágenes reflejan por la luz, que están tomadas a primera hora de la tarde, es decir, recién iniciada la estación de penitencia.
El segundo es saber el recorrido antiguo de la hermandad, y es que antaño, daba un rodeo por Matahacas antes de bajar por la Calle Gerona, por lo que ya tenemos una zona de búsqueda acotada...
Ahora solo queda "divagar por la ciudad de la gracia", como dijera José Maria Izquierdo y mirar a los balcones de Sevilla como hace cada Viernes Santo el Cachorro de Triana...
Y llegamos hasta la plaza de los Terceros, miramos hacia la derecha...y ahí lo tienen...nuestro balcón...
Ha sido difícil, pero muy interesante, nuestra investigación nos ha llevado hasta la Calle Sol, la cual nuestra Sevilla se ha encargado de despojarla ladrillo a ladrillo, de su piel...
Y aún herida de muerte, todavía resiste latiendo con algunas de aquellas casas que le dieron ese increíble sabor. Nos sigue dejando alguna pista para que rescatemos su pasado y no olvidemos aquella imponente ciudad...
Cerramos la publicación con otra instantánea algo más amplia y que nos da un poco más de perspectiva sobre el entorno en aquellos años...
La fotografía recoge el momento en el que la hermandad del Martes Santo salía de la Parroquia de San Roman, y buscaba la Calle Sol para enlazar poco después con Gerona, en algunas ocasiones, y con Alhóndiga en otras.
En esta ocasión, es la Hermandad de la Bofetá, también en la Calle Sol o mas bien ya en la Plaza de los Terceros...
No se que pasa por la cabeza de nuestros dirigentes, de los conservadores o de patrimonio, pero esto es como el cambio climático, llegara un momento en el que ya no habrá marcha atrás y Sevilla sea una caricatura de algo que ya no existe.
Fco. J.Roman Martinez
L.Turbina
Gabriel Lopez Águilas
5 comentarios:
Me admira la capacidad para a través de una foto poner el foco y llegar a descubrir lo que en principio no dice. Felicidades.
Gracias Francisco.
Un abrazo
Hoy he descubierto casualmente su blog y no solo me parece maravilloso sino imprescindible para todos los que buscan los orígenes de las cosas.Mi más grande enhorabuena. Para estas cosas debe servir en gran parte la red.
Gracias Juanjo, me alegra enormemente su comentario. Un abrazo.
Hola y enhorabuena, magnífico blog que me recomendó un amigo. Todavía estoy perplejo con la fantástica investigación que ha hecho Ud con la foto de la calle Sol y su balcón. Lo que no entiendo es por qué "Los Caballos" daban esa vuelta enorme por Matahacas-San Román-Sol-Gerona cuando tenían la calle Gerona casi enfrente de la salida, pero en fin, cualquiera sabe.
Otra cosa, la foto de los nazarenos del Dulce Nombre por la calle Sol puede datarse entre 1921 y 1924 con toda seguridad, según la página web de la Hermandad
http://hermandaddeldulcenombre.org/historia/
Nada más, reitero mi enhorabuena y prometo volver. Soy muy aficionado a las cosas de la Sevilla del pasado, aunque creo que no siempre fue mejor.
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