jueves, 1 de junio de 2017

La muerte del Gigante de Miraflores

Siglo 21, presente, en estos momentos, si amig@s Sevilla sigue destruyendo su patrimonio y por ende su historia, en este caso su pasado industrial...


Esta imagen la conocerá más de uno, es una captura gráfica que nos "sumerge" en aquellas temibles inundaciones de los años 60. Estamos en el corazón del barrio del Retiro Obrero, en su arteria principal, la Avenida de Miraflores.
Aunque a la izquierda de la imagen apreciamos a un grupo de personas con el agua a la altura del zapato, no se dejen engañar, es una inundación de tres pares de narices, tanto que permite un calado suficiente como para que una barca puede navegar por plena avenida...


Como ya hemos comentado, estamos en el antiguo corazón industrial de Sevilla, El Retiro Obrero, donde las fábricas colmaron todo un barrio, llegando a dar empleo al 30% de la ciudad. Observen a la derecha de la imagen la querida, maltratada y hoy por hoy denostada Fábrica de Vidrios La Trinidad...


Hay todo un barrio que durante más de 10 años está luchando por esta fábrica, solicitando al Ayuntamiento y a los diferentes alcaldes la custodia de los edificios por parte de la Aavv Miraflores para gestionar en sus instalaciones diferentes talleres y así conservarla y protegerla de los actos vandálicos y del expolio, sin respuesta alguna por parte de nuestros mandatarios, solo muchas promesas pero ni un solo gesto de voluntad...


A la izquierda de la fotografía tenemos la última gran pérdida del patrimonio sevillano, el antiguo Bingo el Gigante...


El edificio se levanta junto a "los garajes Miraflores", conocidos por multitud de sevillanos pues dentro había también un surtidor de gasolina donde muchos hemos repostado alguna que otra vez. El edificio que ocupaba el Bingo El Gigante, fue construido 1918 para albergar un taller de ballestas para coches, después diversifica su comercio introduciendo productos para el campo hasta que en los años 70 se instaló en el edificio un supermercado, "Supermercado El Gigante". A principios de los años 80 volvería a reconvertirse, esta vez en un Bingo, "Bingo el Gigante" hasta finales del 2014 que cerró para siempre sus puertas...


Tengan en cuenta que hasta 1987, la avenida y todo el barrio estaba protegido por el PGOU dada su singularidad industrias, su historia y el valor patrimonial que suponía para Sevilla. Pero claro, llegó el 2006, ¿lo recuerdan?, pues era el repunte de la burbuja inmobiliaria, ¿y que hizo esta bendita ciudad y lo que nos gobernaban?, pues volver a cambiar el PGOU para desproteger de la piquete todo estos edificios y de ahí el derribo del mismo...


Amig@s, Sevilla solo tenemos una, y o ponemos pie en pared, o en menos de 20 años nos vamos a quedar con absolutamente NADA, y cuando digo nada, es como mucho fachadas inertes con interiores totalmente derribados y reconstruidos que no son más que una farsa, como el edificio El Coliseo, porque las fotografías no son más que eso, fotografias, y no suplen la importancia de lo tangible, el olor, las emociones de entrar en un entorno o edificio construido hace más de un siglo.

ABC
Antonio Garrido Garcia
Marisa Torralba Moreno


lunes, 29 de mayo de 2017

En Sevilla el sinónimo de restauración es destrucción

En Sevilla se usa mucho, más de lo que se imagina el personal, eso de "virgencita que me quede como estoy", ya que esta bendita ciudad desconoce por completo el significado de restauración y conservación. Aquí se coge algo del siglo 18 y se le mete acero corten, escaleras del cristal y nos quedamos tan panchos, es más, lo presentamos a concursos de arquitectura mundiales donde el 99% de las veces se ríen en nuestra propia cara, valiente panda de ignorantes que no saben ni lo que tienen, es el comentario más repetido.
Ejemplo de todo esto que les he comentado lo tenemos todo concentrado en 1000 metros cuadrados de una zona muy céntrica de nuestra ciudad, la Calle Santo Tomas. Como el burro tropieza no una, sino 400 veces, Sevilla pecó de ignorante en esta zona, repetidas veces y en diferentes periodos de nuestra historia. Empezamos con el ensanche de Santo Tomás, ahí echamos abajo el Convento de Santo Tomás  con nada más y nada menos que Miguel Primo de Rivera subido en todo lo alto de la espadaña dando el pistoletazo de salida al piquetazo. Seguimos posteriormente con la demolición de la antigua Aduana y las Reales Atarazanas, esto ya si que no hay por donde cogerlo, y levantamos en su solar un bloque de hormigón como un demonio para instalar en el las oficinas de Hacienda. Después, como las oficinas de hacienda se quedaron pequeñas, nos fijamos en el edificio de enfrente, El Coliseo, un alarde de regionalismo sevillano por los cuatro costados, y lo vaciamos como si fuera un huevo kinder para hacerlo oficinas todo su interior y ampliar allí la delegación de Hacienda. De remate cogimos la Casa de la Moneda, y como la madre del Pali que vivía en el número 15, dios la tenga en su gloria, había fallecido, dijimos de hacer un hotel en él y plantarle un ático con piscina en todo lo alto, ahí está, paralizado por patrimonio pero la obra ya está echa. Y ya le pusimos la guinda con el retablo cerámico de la Calle Santander...


Esta obra de arte religioso del costumbrismo sevillano era hace menos de 20 años como el San Judas Tadeo de la Iglesia del Silencio, no pasaba una hora sin que una señora o un señor estuviera delante del retablo echando unos rezos a la Virgen del Carmen y dejándole un puñaito de claveles. Fijense en la fotografía porque la veo y veo a mi madre rezando por mí como lo hace cada vez que pasa por por San Ildefonso para ver al Cautivo...


El retablo lo montó en 1925 un señor en la fachada de su casa, ¿de qué señor les hablo?, pues de Don Juan Bautista Calvís y Rives. Su casa estaba adosada a los restos del Postigo del Carbón y a su espalda tenía la Torre de la Plata, esta esta concretamente...


Voy hacer un pequeño inciso para contarles una curiosa anécdota de Don Juan Bautista Calvís. Este hombre era un afamado banquero de Sevilla, venía de una familia Italiana con mucha historia y que sirvió a base de bien a las Cortes Españolas, por lo que ya llevaba una buena herencia en el bolsillo además de lo que juntara con su oficio de banquero. Pues bien, este hombre que representaba a la burguesía de la época, estaba al corriente del ensanche de Santo Tomás, y quiso sacar tajada de aquello por lo que se hizo cargo de varias parcelas en la Calle Santander, y unido al solar que surgiría del derribo de su casa ideó un proyecto para un nuevo edificio bajo el diseño del Arquitecto José Espiau...


Impresionante, como todo lo que diseñaba este señor. El edificio buscaba cerrar el solar que quedaba entre la Casa de la Moneda y la Calle Matienzo, no buscando la profundidad pero si la altura en el alzado del edificio...


Bueno, como vemos hoy en día el edificio no se realizó ya que este entró en un litigio con Marañón por la propiedad y el derecho de construcción en la zona y todo este hermoso proyecto se fué al garete.
Ahora retomamos de nuevo nuestro retablo cerámico de la Virgen del Carmen. Quedamos en que el retablo estaba en un lateral de la fachada de la casa, que a su vez estaba adosado a los restos del Postigo del Carbón, contando en bajo la hornacina con una puerta de acceso para llegar a un pequeño cuartito que hacía las veces de trastero y donde por últimas la Señora Rosalía Moreno, tenía guardada sus habíos con los que de vez en cuando escamondaba el retablo...


Ahora viene la parte dolorosa, llega 1990 y nuestro querido Ayuntamiento acomete una profunda remodelación de la zona, ya que quería poner en valor la Torre de la Plata y los lienzos de muralla que hay junto a ella, y para eso no se le ocurre otra cosa que derribar la casa donde estaba alojada el retablo y plantar el azulejo directamente sobre parte de los restos del Postigo del Carbón...


Como ven en la imagen anterior, si ustedes pasan por allí, lo que hay de aquella remodelación es un trozo de la fachada de la casa derribada a modo de tapia improvisada, un modulo de obra para el pobre boby que se encarga del aparcamiento ridiculo y humillante que nos han plantado junto a la Torre de la Plata y las murallas, algo que cuando el turista llega y ve aquello entra en estado catatónico y no piensa en volver a la ciudad mientras viva. Claramente la reurbanización fue un gasto estúpido que hizo el ayuntamiento para dar acometidas al pedazo de mamotreto que han levantado junto a la Casa de la Moneda, conocido popularmente como "el palomar" y del que me niego a poner una fotografía en esta página. Nos han dejado la Calle Santander hecha literalmente "una mierda", con un edificio protegido destrozado de por vida y paralizado en obra como es el de la Casa de la Moneda, un mamotreto como es el del "Palomar" que termina por destrozar completamente la estética de la zona, y un solar/escombrera para aparcar coches que dejen renegrio de contaminación las murallas que allí yacen y la Torre de la Plata. Como guinda nos echan abajo el retablo cerámico y nos tiran el azulejo sobre un pared, que al menos que seas sevillano o te lo hayan explicado, no sabes qué son los restos de un Postigo por donde durante siglos entró la riqueza más grande que hubo en el mundo proveniente de un lugar llamado Las Indias, por ende los que mandan en el planeta a día de hoy, América. Marca Sevilla, así nos vendemos al mundo y así cuidamos nuestro patrimonio, y mira que me duele en el alma pero aquí estoy yo, denunciando y rezando por que algo cambie hoy, mañana o cuando toque...

ABC
Cerámica de Sevilla
Colegio de Arquitectos
Jose Antonio Murillo Cabrera